En la Edad Media, una prisión no sólo era un calabozo lúgubre y húmedo, sino también altas torres, encima de las cuales se podía construir una celda. El héroe del juego Castle Escape, un caballero, llegó al reino a petición del rey, que tenía problemas con una especie de monstruo en el bosque cercano. A su llegada, el huésped fue alojado en una habitación en lo alto de la torre. Durmió bien y al despertar decidió bajar, desayunar y comenzar su misión. Sin embargo, resultó no ser tan sencillo. La puerta está cerrada, no hay llave y es inútil llamar a alguien. Las paredes gruesas no dejan pasar el sonido. Ayuda al héroe a salir de la torre del castillo en Castle Escape.
